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jueves, 9 de junio de 2011

¿Si se ejerce la equidad de género se logra disminuir la discriminación femenina en México? por Karen Julian


Una de las características importantes del ser humano es su extraordinaria capacidad de reflexionar acerca de su existencia misma y el entorno en el que se encuentra inmerso con miras a su mejoramiento y transformación.
Ante una sociedad cambiante y cada vez más compleja del mundo globalizado, es preciso cuestionarse acerca de los roles que han desempeñado hombres y mujeres en nuestra sociedad mexicana y algunas de sus repercusiones de tipo personal y social. Al respecto Patricia Herrera Santi señala: “En los últimos años se han delineado tendencias para afrontar la cuestión femenina, subrayando fuertemente la condición de subordinación de la mujer, que  para ser ella, se constituye en antagonista del hombre; a los abusos de poder responde con una estrategia de búsqueda de poder. Este proceso lleva a una rivalidad entre los sexos, en el que la identidad y el rol de uno son asumidos en desventaja del otro”[1].
Por ello considero que la equidad de género dentro de un marco legal surge como una alternativa para aminorar la discriminación femenina en nuestro país, situación que doy tratamiento a continuación presentando  una descripción amplia del término y sus derivaciones.                                                                          
En el desarrollo histórico de la humanidad se han transmitido valores a través de la cultura, la religión y las costumbres, relacionadas con el papel y rol que deben asumir los diferentes sexos en la sociedad, de ahí que generalmente a la mujer se le destinó a la procreación, cuidado de los hijos y del hogar con la obligación de obedecer a su pareja y sin tener derecho a opinar, mientras que el hombre tendía a garantizar la satisfacción de las necesidades de subsistencia en la familia.
“Durante siglos se ha sostenido el principio de que las mujeres son diferentes a los hombres, inferiores y dependientes, por considerarla sexo débil y al hombre sexo fuerte, tomando en cuenta sus características físicas y biológicas”[2].
Con el surgimiento de las clases sociales aparece también la discriminación de la mujer y su conversión por parte del hombre, en un objeto de placer.
Es importante mencionar también que el contexto familiar espacio primario para la socialización de sus miembros, es la primera instancia, lugar donde se refuerza la diferenciación genérica al asignar diferentes actividades a niñas relacionadas con el hogar y servicio y los niños actividades de competencia  permitiéndoles tener un mayor control sobre el medio externo.
Históricamente se ha colocado a la mujer en una situación de menor poder respecto al hombre provocando la discriminación de género con menos derechos en la vida familiar, económica, política y cultural, por adjudicarle la sociedad valores negativos basados en el machismo. AZ Manfred, dice: "Hablar de mujer desde una perspectiva de género, es referirnos a una historia de supeditación que nace con la implantación del patriarcado en las comunidades primitivas y no ha dejado de ser así en las comunidades contemporáneas"[3].
Para la mujer, no es nada sencillo vivir dos mundos, los cuales tiene que compaginar para no quedar mal en ninguno de ellos. Por una parte, están sus aspiraciones y logros personales, profesionales y por el otro, está su papel de madre y esposa en casa, ámbito original, identitario, que cuando lo combina con actividades externas puede provocar conflicto, no sólo por el esfuerzo físico y mental que conlleva, sino por los efectos que tiene en sí misma al ubicarla en una postura disyuntiva o valorativa respecto a su ser y hacer femenino y el efecto que provoca en su pareja.
“La discriminación de género implica que no se otorgan iguales derechos, responsabilidades y oportunidades a hombres y mujeres”[4]. Esta diferenciación, que abarca normas de comportamiento, actitudes, valores y tareas, donde lo femenino se supedita a lo masculino, trasciende a todas las esferas de la vida ocasionando una relación de poder dominante del hombre, mientras que la mujer, su papel y tareas, son devaluadas socialmente.
Al analizar lo descrito puedo argumentar que las afectaciones personales y sociales derivadas de la discriminación de género hacia la mujer son realmente impresionantes en el sentido de que dañan la integridad como ser humano y que por lo tanto es urgente solucionar. Veamos algunas de ellas: baja autoestima, violencia física y mental que va desde las humillaciones hasta los golpes, amenazas y asesinatos. En lo social, la falta de acceso a la educación (en zonas marginadas), limitación en la realización de proyectos de vida, entre otras.
Con el paso del tiempo la idea de las capacidades inferiores de la mujer fueron superadas por el avance en el conocimiento, comprobándose que si bien existen diferencias entre hombres y mujeres, estas no implican inferioridad, es decir, el sexo no es determinante en la eficiencia o eficacia de las personas.
Así mismo a partir del siglo xx se incrementó la participación social de la mujer en los ámbitos social, político, laboral, demostrando éstas excelentes resultados en la toma de decisiones, ello permitió que se ganara espacio y la lucha por el derecho a determinar sobre su condición de gerente de la reproducción humana.
Ante esta perspectiva “La equidad de género es la igualdad del hombre y la mujer en el control y uso de los bienes y servicios de la sociedad. Esto implica extinguir la discriminación entre ambos sexos y que no se privilegie al hombre en ningún aspecto de la vida social. Actualmente es necesario que la mujer haga valer sus derechos como ser humano, y la igualdad de oportunidades en los sectores sociales, culturales y políticos”[5].
Es la aceptación de las diferencias entre hombres y mujeres, y la aceptación también de derechos, buscando el ideal de un equilibrio en el que ninguno de ambos sexos se beneficie de manera injusta en perjuicio del otro”[6].
Actualmente la desigualdad de género es una problemática que los gobiernos y organismos nacionales han tratado de erradicar con el decreto de leyes y la lucha de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, pero si bien es cierto que se han tenido avances en el tema, también es cierto que falta mucho por hacer.
Como conclusión puedo decir que es realmente necesario que cada uno de nosotros reflexione con profundidad acerca de esta problemática, concientizándonos verdaderamente sobre la equidad de género y desde luego, poniéndola en práctica en los diferentes sectores de nuestra vida, en el sentido amplio y estricto de la palabra por el contenido de su significación; así como practicar los valores de respeto, tolerancia e igualdad, entre otros, ya que desde mi punto de vista considero completamente absurdo continuar relegando al sexo femenino hasta nuestros días en una sociedad llena de cambios y transformaciones, obstaculizándose el crecimiento económico, desarrollo social y humano.
Nos corresponde luchar pues por una sociedad más justa e igualitaria, donde se ejerzan los derechos individuales y cuya armonía conlleve  al progreso y bienestar de los ciudadanos.


[1]    Herrera Santi Patricia; Familia funcional y disfuncional: un indicador de salud, [Rev. Cubana: Med Gen Integr, 1997], 13-15.

[3]    Manfred AZ; Historia Universal [Moscú: Editorial Progreso, 1977], 9-14.

[4]    http://www.econlink.com.ar/equidad-genero (acceso mayo 24, 2011).
[6]     http://es.wikipedia.org/wiki/Equidad (acceso mayo 24, 2).

12 comentarios:

Yudeinis Yaneliep dijo...

Para mi me parece importante este tema, porque nos habla lo que es lo que se está viviendo en la actualidad. Pienso y creo que nosotros mismos deberíamos de hacer conciencia de acerca de la igualada de géneros hacia la mujer. Por otra parte considero que si argumentan bien, y existió puntos de vista del equipo.

Yudeinis Yaneliep dijo...

Para mi me parece importante este tema, porque nos habla lo que es lo que se está viviendo en la actualidad. Pienso y creo que nosotros mismos deberíamos de hacer conciencia de acerca de la igualada de géneros hacia la mujer. Por otra parte considero que si argumentan bien, y existió puntos de vista del equipo.

karen itzel dijo...

Gracias compañera yude, todos tenemos que hacer conciencia respecto a los derechos y obligaciones tanto de hombres como mujeres, si no se hace así vienen los problemas como la discriminación de la mujer, el machismo, etc.

marisol dijo...

Me parece muy bien argumentado tu tema y tu postura. Para mi, el problema de discriminacion es por la falta de cultura e informacion de todas las personas que la llevan a cabo.

karen itzel dijo...

Exacto, yo igual considero que es muy importante la cultura e información amplia de cada persona y eso principalmente empieza en la educación que los padres dan a sus hijos, si la educación es buena para toda la sociedad el mundo sería diferente.

Vianey Roman Ocampo dijo...

Esta bien desarrollado tu ensayo y considero que estan bien fundamentadas tus posturas, estoy de acuerdo con tigo sobre como es discriminada la mujer, eleguiste muy bien tu tema y es muy importante que se de aconocer ya que es muy importante.

karen itzel dijo...

Gracias Vianey y claro que es un tema importante, ya que hay grandes problemas debido a la inequidad entre hombres y mujeres que dañan no solo a la mujer sino también a la sociedad en general, trayendo consigo los diferentes tipos de violencia: psicológica. física y mental.

Ivan Israel dijo...

Me gusto mucho tu ensayo compañera Karen como defiendes tu postura ante esto y como argumentas la verdad esta muy bien tu ensayo.

karen itzel dijo...

Gracias compañero Iván.

Diana Laura Garcia Villanueva dijo...

Me parece que tu ensayo esta bien compañera ademas de que es un tema muy tratado en este blog, supiste caracterizarlo con una buena tesis y con buenos argumentos, ¡Felicidades!

Getsemani Bernal Rayo dijo...

Interesante tema compañera y déjame completar tu tesis al decir que la discriminación seguirá a no ser que haya un cambio mundial en la sociedad.
tus citas están muy bien y tu tema increíble.

Unknown dijo...

Muchas gracias por su participación.

Saludos.